Holbox, donde los colores se escuchan

¿Qué te imaginas con las palabras “isla paradisíaca”? seguramente apareció en tu mente una tranquila playa de arena blanca con un mar de colores enfrente, una palmera inclinada y un cielo espectacular sobre toda la escena. Posiblemente es ese lugar en tu mente al que vas cuando el estrés intenta tomar el control de tu vida ¿no es así ?. México es famoso por tener algo para todos los gustos y las “islas paradisíacas” no son la excepción, así que hoy te hablaremos de una de ellas: Holbox.

¿Dónde está Holbox?

Holbox en maya significa “hoyo negro” y es la isla más al norte de Quintana Roo, en la unión del Mar Caribe y el Golfo de México. Aunque tiene una aeropista para aviones pequeños, la manera más común de llegar es por barco desde el pueblo de Chiquilá en la parte continental. Chiquilá está a 140 Km de Cancún y a 120 de Playa del Carmen (alrededor de 2 horas de carretera), puedes llegar en los autobuses que salen de las respectivas terminales en ambas ciudades, rentar un auto, tomar una excursión e inclusive tomar un taxi si tu presupuesto te lo permite. En cuanto al precio más económico, te sugerimos que compares entre el autobús, la excursión o rentar un auto, porque si son varias personas, posiblemente sea más barato tener su propio medio de transporte.

Si te decides por el auto, te darás cuenta cuando llegues a Chiquilá que la misma vive de la pesca y el turismo que cruza a Holbox, pero en si no es un lugar que amerite quedarse más tiempo del que ocupes para estacionar el auto pues aquí hay varios estacionamientos (muchos con cajones techados) que te cobran una tarifa fija por día (nosotros pagamos $100 pesos por día). Una vez resguardado el auto, podrás caminar al muelle donde salen los ferris que cobran $200 pesos por persona, viaje sencillo y tarda 15 minutos en cruzar. Si, si lo comparas con el precio del ferry que lleva a Cozumel, que son 45 minutos de viaje y el boleto de $400 pesos incluye tu auto y pasajeros, llegar a Holbox es caro, pero vale la pena visitarlo, veamos porque.

Moviéndose en Holbox.

El pueblo de Holbox es realmente pequeño, 800 metros de ancho por 4 kilómetros de largo en sus extremos más alejados pero la mayoría de los atractivos están en el centro y se puede recorrer a pie si gustas de caminar, pero también puedes rentar una bicicleta, moto, un carrito de golf o tomar los taxis que existen por sus calles. Ten en cuenta que el caminar puede imponer algunos retos para personas con alguna necesidad especial, ya que las calles no están pavimentadas, las banquetas son angostas y muy irregulares con obstáculos, además de que cuando llueve las calles se inundan fácilmente. Pero aún así, caminar es la mejor manera de descubrir su colorido centro lleno de hermosos murales y sus playas impresionantemente hermosas y apacibles. Ten en cuenta que visitar Holbox es una invitación a la tranquilidad, la observación y acercamiento a la naturaleza, pero eso no quiere decir que en las noches no haya agradables lugares para cenar, tomar una copa, bailar, convivir con tus amigos o con gente nueva que conozcas en el lugar.

El hospedaje.

Como siempre, te recomendamos que hagas tu reservación de hospedaje desde internet para que puedas elegir la ubicación y el precio del lugar donde te vas a quedar. La isla ofrece opciones para todos los presupuestos y hay desde económicos hostales hasta elegantes hoteles boutique para los viajeros más exigentes. Lo que no vas a encontrar son enormes complejos turísticos.

Los imperdibles.

A pesar de su tamaño, Holbox tiene mucho para descubrir y te sugerimos que te hospedes dos o más noches para poder apreciarlos.

El centro.

Camino a tu hotel te darás cuenta que todo el centro resplandece con los muchos murales que hay a lo largo de sus calles e incluso el parque central tiene un domo que reproduce escenas de la tradición maya, lo que lo hacen una fiesta de color, por eso decimos que aquí los colores “se escuchan” pues son en tonos muy alegres y están por todos lados, inclusive junto al mar y lo hacen un lugar ideal para tomarse fotos con los mismos.

Para los amantes de la playa.

En el lado opuesto del muelle están las playas que le han dado fama a la isla y verás que el oleaje es muy tranquilo y la profundidad aumenta muy poco, aunque te alejes de la orilla muchos metros. Solo ten cuidado de no traspasar las boyas de seguridad ya que el tráfico de lanchas turísticas es constante y circulan rápidamente. Te recomendamos caminar toda ésta playa de punta a punta pues a todo lo largo hay muchas vistas y lugares hermosos para visitar. También aquí encontrarás camastros, pequeñas palapas, uno que otro bar y sombras para refrescarte del calor y poder admirar el mar frente a ti. Si llegas hasta el extremo oriente de la misma, posiblemente te toque admirar de lejos flamingos que aprovechan la poca profundidad del mar para alimentarse.

El tour imperdible para toda la familia.

Los atractivos de Holbox se extienden más allá de su territorio y aquí podrás contratar tours que te llevarán a ver maravillosos atractivos naturales que están muy cerca como son “La Isla de los Pájaros”, el “Cenote Yalahau” y la “Isla de la Pasión”. En el siguiente video podrás encontrar más información y detalles al respecto:

Solo para aventureros.

Para los más amantes de la naturaleza que gustan de ir a su propio paso, te sugerimos llegar a Punta Cocos en el extremo suroeste de la isla, donde en ocasiones llegan flamingos y en la noche podrás admirar el asombroso fenómeno de la bioluminiscencia. Desde aquí también podrás caminar a lo largo de la playa hasta regresar al centro, son casi 3 kilómetros de bellezas reservados únicamente a los más aventureros, ya que la playa desaparece en algunos tramos y hay que vadear en el mar, así que si llevas cámara, te sugerimos llevar zapatos para agua y fijarte donde pisas porque es fácil tropezarse con alguna roca o rama sumergida mientras vas caminando por la orilla del mar. Sin embargo, a pesar de éstos pequeños inconvenientes, los paisajes que podrás admirar en sus solitarias playas ¡valen mucho la pena!

Amaneceres y puestas de sol.

Al ser una isla, Holbox ofrece dos veces al día éste maravilloso espectáculo gratuito, ya sea para los amantes de levantarse temprano o acostarse tarde por igual y es que éste evento es tan popular en la isla que en su característico muelle podrás ver a muchas personas que acuden todos los días a presenciarlo y por buenas razones, pues no importa cuantos amaneceres o puestas de sol hayas presenciado, todas son únicas, maravillosas y dignas de admirarse como la primera vez.

Bajo el mar.

Holbox es famoso también por ser uno de los destinos para observar al pez más grande del mundo que puede medir hasta 14 metros de largo: el tiburón ballena. Aquí puedes tomar tours desde mediados de mayo hasta mediados de septiembre para admirar a este gentil gigante.

Un delicioso momento.

Siendo una isla, es de esperarse que la especialidad local sean los pescados y mariscos. Es cierto, pero también hay otras opciones y aquí te compartimos las que probamos y recomendamos para que tengas un delicioso momento durante tu estancia.

Pizza de langosta. Además de los lugareños, Holbox está habitada también por migrantes de otros países que decidieron hacer de éste pequeño paraíso su hogar, entre ellos, algunos italianos que descubrieron que un fino ingrediente local como la langosta, se llevaba de maravilla con la pizza. El éxito fue tal, que ahora es uno de los iconos del lugar y aunque no es barata (una pizza para dos personas costó $600 pesos), es tradición venir y probarla, ya depende de ti si deseas comprar una o no. Ese día la probamos en el restaurante ROOTS y estaba bien, pero no es el único restaurante que ofrece éste platillo. Lo mejor es que compares y pruebes otros lugares para decidir cual te gusta más.

Mariscos. Un restaurante que si te recomendamos no perderte es Las Panchas en la calle Esmedregal. Aquí nos gustó la cantidad, el sabor y los precios se nos hicieron razonables para deleitar tu paladar con los pescados y mariscos que preparan ahí.
Con las 3 B’s. No es secreto que como la mayoría de los viajeros, tenemos que administrar el dinero que gastamos para los viajes y en Holbox encontramos uno de esos lugares que -como decimos en México- califica con las 3 B’s (Bueno, Bonito y Barato). En la esquina de la calle Pedro Joaquín Coldwell y la calle Palomino están las Tortas del Carmen y aquí podrás encontrar desde desayunos, comidas en paquete, además por supuesto de ricas tortas tamaño jumbo, ideales para los que somos de “8 cilindros” y que por la intensa actividad que realizamos durante los viajes, disfrutamos de un almuerzo y comida abundante a buen precio.
Para desayunar. Si vas caminando a Punta Cocos, te sugerimos pasar a almorzar al restaurante del hotel Casa Blat Há en la calle Charal, esquina con Cherna y que tiene un agradable comedor donde puedes pedir paquetes de desayunos y que tiene al centro una fuente con bebidas ilimitadas incluidas con tu desayuno, un detalle que a nosotros nos encantó.
Otro lugar agradable está cerca de Las Panchas y se llama El Cafecito, el desayuno tenía buen sabor, pero por el tamaño de las porciones, es más recomendable para las damas y los niños, pero siempre puedes pedir otra cosa si eres de “tanque grande”.

¡El postre! Los italianos no solo trajeron las pizzas ¡también los gelatos ! y no hay mejor postre para calmar el calor y la sed que un helado con sabores de fruta tropical. La heladería que más nos gustó se llama El Mangle Blanco y está a la vuelta de las Tortas del Carmen sobre la calle Palomino, el helado de la foto es de coco y estaba muy buena.

Aquí puedes ver nuestro video más reciente:

Como verás, un lugar pequeño no quiere decir que tenga pocos atractivos y nosotros nos hospedamos 3 noches en ésta paradisíaca isla que es un favorito del Quintana Roo por buenas razones ¡y nos hubiéramos quedado un par de noches más! ¿ya lo apuntaste en tu bucketlist?

Datos útiles.

Holbox está rodeado de manglares que son maravillosos para cuidar la ecología, pero que también son criadero de moscos e incluso durante el día puedes ser atacado por enjambres de éstos insectos si te pones en una sombra. La cantidad de moscos aumenta durante la salida y la puesta de sol así que no olvides repelente biodegradable ecológico.
Recuerda que Holbox es una isla tropical y debes de protegerte del calor y la deshidratación. Lleva tu botella reusable para cargar agua, sombrero, ropa ligera y bloqueador.
Obviamente lo que hace más hermosa a la isla es la naturaleza misma, recuerda llevarte TODA tu basura para preservar ésta maravilla.
Lleva suficiente dinero en efectivo, ya que hay pocos cajeros automáticos y muchos negocios locales no aceptan tarjetas.
¡Por supuesto que no olvides llevar tu cámara y suficiente memoria! Porque con éstos paisajes, no te darás abasto con la cantidad de fotos hermosas que vas a tomar aquí.